Experiencias de un español en Omán, un tranquilo país en la boca del Golfo Pérsico.

viernes, 13 de noviembre de 2009

Los tres mosqueperros

El viejo McDonald tenía una granja, ¡ia ia oh!
Y en esa granja tenía una perra, ¡ia ia oh!
que hacía guau guay aquí que hacía guau guau allá
guau guau guau guau sin cesar.
El viejo McDonald tenía una granja, ¡ia ia oh!

El viejo McDonald tenía una granja, ¡ia ia oh!
Y en esa granja tenía un gato, ¡ia ia oh!
que hacía miau miau aquí que hacía miau miau allá
miau miau miau miau sin cesar.
El viejo McDonald tenía una granja, ¡ia ia oh!

El viejo McDonald tenía una granja, ¡ia ia oh!
Y en esa granja tenía otra perra, ¡ia ia oh!
que hacía guau guay aquí que hacía guau guau allá
guau guau guau guau sin cesar.
El viejo McDonald tenía una granja, ¡ia ia oh!

...................Canción folk norteamericana para niños.
Cuando Javier y Belinda nos visitaron no se esperaban dormir en un zoo o en la granja del viejo McDonald.

Y es que Charlie, la pobre solo tenía compañía humana, que estaba interesada en otras cosas.

Así que Naomi trajo un gato de la protectora de animales. Le ha puesto de nombre Mouse (ratón). ¿Un gato llamado ratón para hacer compañía a un perro? Es verdad, no tiene sentido.
El gato no vino en una bolsa, lo que ocurre es que le encanta meterse dentro de ellas.
Lo que todavía no controla demasiado es cómo salir.
Es un trasto. Aparte de meterse en todas partes se ha comido los cables de audio del equipo de música, ha roto cacharros de cocina al trepar alrededor y bueno, menos mal que no le ha dado por beber cerveza. Por un tiempo intenté cambiarle el nombre a "Stripe"(el Gremlin malvado hermano de Gizmo). Pero se ha ido calmando ya que lo trajimos muy bebé.
En su defensa he de decir que Charlie no es mucho más buena, pues ayer se comió un móvil recién comprado (ver foto abajo). A la semana de traerla se comió el National Geographic de nuestro amigo Santiago. Le pareció especialmente interesante un artículo sobre Venecia (lo tendremos en cuenta para las próximas vacaciones). También se ha comido dos manteletas, plantas etc.

Pero lo peor es cuando Mouse y Charlie trabajan en equipo, Mouse abre un armario de la cocina y Charlie se come unos auriculares o un mando a distancia (le gusta la tecnología )...(y Venecia) o Mouse tira desde la encimera un bote de lápices y Charlie se come un rotulador rojo dándonos un susto de muerte al llegar a casa pues parecía que a la perra la habían tiroteado. Está claro que claro que Charlie necesitaba un amigo mejor que Mouse (una mala influencia) así es como vino Blondie.

Blondie (abajo) es un amor de perra. Es muy cachorra todavía (7 meses) pero como ya la habíamos cuidado antes, sabíamos que Charlie y Blondie se llevaban muy bien. Blondie también es un rescate de la protectora, pero viene con 4 patas, dos ojos, etc. Bueno, solo una oreja y media como se ve en la foto, aunque si oye algún ruido raro si consigue estirar ambas.
Blondie es muy distinta a Charlie en que es una bomba de energía, en cuanto pisa la playa se pone como loca. Tiene la velocidad punta del AVE.
Le encanta jugar y ya ha aprendido a devolver lo que le tiras (con la vaga de Charlie no hay forma) ya se sabe los mismos trucos que Charlie (sentarse, tumbarse, dar la pata y quedarse en el sitio) salvo rodar y ponerse panza arriba (eso y dar la pata te lo hace Charlie gratis por si cuela y cae una galleta).Por cierto ¿Te acuerdas de que antes a Charlie le daban miedo las olas? Ahora se mete a nadar ella sola, le encanta. Claro, en cuanto ha visto lo que refresca ya no quiere salir.
Salvo para jugar con Blondie.
Blondie le ha venido muy bien pues hace que Charlie haga más ejercicio y se hacen compañía.
Se lo pasan fenomenal juntas.
Pero lo curioso es que el mejor amigo de Blondie es:
Mouse (ahora rebautizado Mousie para tener a los tres mosqueperros: Charlie, Blondie y Mousie.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Comienza la temporada de ski en Omán

Come on baby wait and see
Yes I'm gonna take you surfin' with me
Come along baby wait and see
Yes I'm gonna take you surfin' with me

Let's go surfin' now Everybody's learning how
Come on and safari with me

...............................Surfin' Safari, The Beach Boys
Estas son las pistas, aunque más bien parecen olas.

Y este es el beduino de pacotilla surfeador de las arenas.
Hacer snowboard en las dunas es muy divertido. Tiene una consistencia parecida a la nieve virgen pero es menos resbaladiza.
Javi ha venido a visitarnos desde Madrid. A pesar de no tener experiencia previa con la tablanieve, se ha desenvuelto en la arena fenomenal. Lo bueno que tiene la arena es que si te caes no te haces daño y eso ayuda para aprender.

Había que probar el ski también. La verdad es que los palillos estos son muy prácticos.
Pero como puede verse, el ski no es mi fuerte.
Belinda también surfeó, pero como su "stance" es "goofy" (va con el pié derecho primero) y Naomi estaba a la derecha haciendo fotos, solo tengo imágenes de su popa.


Como extra a esta historia, incluyo un vídeo de la última visita de los reyes de Inglaterra a Omán.

Ole qué gracia montando a camello.
Somos ridículos, es cierto. La beduina se debe estar partiendo de risa bajo la máscara, tanto como el camello.
La verdad es que los beduinos son muy buena gente. Es muy interesante charlar con ellos. Lo malo es que con estos de la foto no te podías entender en inglés. Por no poder, no puedes ni hablar árabe con ellos pues usan un dialecto que deja a los Muscatíes "con los dedos de los pies abiertos" (expresión de sorpresa utilizada en Cartagena, Murcia).

Belinda y Javier nos visitaron por una semana y creo que se lo pasaron muy bien. Nosotros encantados porque nos hace vivir nuevas aventuras.

Después de un día arriba y abajo con el forfait, hay que retirarse cuando se va la luz.

Calentarse los pies en la hoguera,
Y contar historias al calor de la lumbre.
Espero que esta historia haya sido más interesante que la que estaba contando en la foto.

lunes, 21 de septiembre de 2009

4x4 en Omán

Hey, what else can we do now ?
Except roll down the window
and let the wind blow back your hair.
Well the night's busting open.
These two lanes will take us anywhere.
We got one last chance to make it real.
To trade in these wings on some wheels
Climb in back,
heaven's waiting on down the tracks.

(Hey, ¿Que más podemos hacer?
Excepto bajar las ventanillas
y dejar que el viento ondee tu pelo.
La noche está abierta de par en par.
Estos dos carriles nos llevaran a cualquier lugar.
Tenemos una última oportunidad para convertirlo en realidad.
Para cambiar estas alas por unas ruedas.
Súbete,
el cielo está esperando al final del camino).

...........................Bruce Springsteen, Thunder Road.
Los que me conocen saben que siempre he sido un fiscal en contra de los 4x4. Consumen y contaminan demasiado. Son inseguros para los peatones, para otros conductores y hasta para el propio dueño. Mucha gente piensa lo contrario, pero si bien es cierto que en una colisión su enorme masa en algunos casos puede jugar a favor de los pasajeros, otra cosa es indudable, es más probable tener un accidente con estos bichos pues la frenada, maniobrabilidad y estabilidad es muchísimo peor que la de un Seat Panda. Pienso que más del 90% de los dueños de todoterrenos en España no los meten en el campo. Ni siquiera pisan los charcos. El argumento de que el espacio interior lo hace un vehículo imprescindible si tienes niños no es válido pues los monovolúmenes o las versiones sport wagon de los turismos son muchísimo mas coherentes.
Además de macarra hay que ser tonto para comprarse un Hummer ranchera y ponerle ruedas de perfil extrabajo que no te permiten hacer 4x4 con el coche, por no poder, no puedes ni pisar un socavón en la carretera pues te puede reventar la rueda.

Por supuesto que respeto a los que necesitan el 4x4 para trabajar en la granja, o para meterse en lo más profundo del campo, pero solo me viene a la cabeza ahora mismo el caso de mis amigos Nacho y Oscar, cuyos todoterrenos han vadeado, se han atascado en el barro y, todo sea dicho, uno de ellos hasta volcó. También he de decir que en España he subido hasta la cima de Peñalara, he bajado hasta la Laguna Negra del Circo de Gredos y he rodeado el Pico Urriellu (mal llamado Naranjo de Bulnes) sin necesitar jamás un 4x4.

Este rollo me lleva a la siguiente pregunta ¿Es necesario tener un 4x4 en Omán? La respuesta, en mi opinión es, aunque pueda sorprender: NO.

Salvo que te guste ir de excursión a ciertos Wadis (no todos son inaccesibles en turismo), al desierto o que, efectivamente trabajes construyendo el futuro jardín botánico de Omán como unos amigos nuestros de aquí, no te hace falta un 4x4. Las carreteras están perfectamente asfaltadas y hasta ahora Naomi se ha apañado fenomenal con su Peugeot 206 y yo con mis diferentes turismos alquilados por mi empresa.

Claro que si quieres ir de excursión a ver esto:necesitas un 4x4. (recomiendo pinchar sobre la foto para verla en grande) Es el mirador de Diana, (por la visita de la princesa Diana de Gales en 1990) en el Sayq Plateu. Para que te hagas a la idea del tamaño del agujero, a la izquierda de la foto están Naomi, Miguel Ángel y Santiago (camiseta naranja). Lo curioso es que la mayor parte del camino es asfaltado (al fondo en el centro/izquierda de la foto), pero hay un puesto militar que solo permite el acceso a 4x4 en buen estado. ¿No me crees? Mira la guía de 4x4 Omán:
Esto es en parte porque aparte de los caminos "no asfaltados", necesitas un coche potente para subir y aunque muchos turismos son más que potentes, la forma más fácil de discriminar es solo permitir el paso a todoterrenos. Otra cosa que hay que tener en cuenta es el freno motor. Algo muy fácil de olvidar en un país donde la mayoría de los coches son automáticos. Hay conductores que o no saben o se olvidan de bajar con marchas cortas (se puede hacer con un automático) se bajan la carretera usando el freno normal que se recalienta y mueren despeñados junto con todos los pasajeros. Por si acaso te lo recuerdan en el puesto de control de una forma muy macabra:
(también he visto algún que otro cartel)
Si llegamos al mirador (y volvimos sanos y salvos) fue gracias a nuestro amigo Santiago y su 4x4. El y nuestro amigo Miguel Ángel ya son veteranos de este blog.
El Sayq Plateau es una marvilla. Se eleva entre 2000 y 2400 m.
Aquí arriba llueve más frecuentemente que abajo en Mascate y gracias a un sistema de terrazas cultivan avellanas, granadas, albaricoques, melocotones, etc. Las palmeras conviven con los cerezos y las rosas perfuman el ambiente ¿Rosas? Si. A algunas mujeres quizás le suene el perfume Amouage. Se puede comprar en todos los duty frees. Pero con impuestos o no es carísimo. Es, que yo sepa, el único producto que exporta Omán aparte del petroleo y del incienso (otro día cuento esto). Pues bien, el Amouage sale de aquí.
De este monte bautizado "la Pirámide" por Santiago no, hombre. De esta región.

Otro sitio donde es mejor ir en 4x4 es a la playa de Jebel Sifah. Aquí nos llevaron este invierno pasado nuestros amigos Ahmed y Santiago. (merece la pena pinchar en la foto para verla en grande)
De esta forma pudimos ir toda la panda a la playa.

Conducir un 4x4 en la arena no es fácil:

Sobre todo si es tu primera vez. Es cuestión de práctica.
Esta es la mitad de nuestro equipaje para un picnic en la playa. Nótese el reproductor de DVD en el maletero para estar entretenido en las acampadas. Yo prefiero ver las estrellas.
A Ahmed, como a todo buen omaní le gusta el café, por lo que se ha instalado una cafetera en el maletero. No es broma, funciona de verdad.
Estas son unas niñas omaníes guapísimas recogiendo leña en la playa de Jebel Sifah.

No he contado que llevo una temporada construyendo un centro comercial en Sohar, a 2 horas de Mascate. También estoy haciendo unas urbanizaciones en las afueras de la capital. ¿Y que pasó con el campo de golf Muscat Hills? Uff. Es una historia muy larga. Otro día. Pero el caso es que dentro de unas semanas empiezo las primeras 6 villas en Muscat Hills Golf Course and Country Club (después de llegar hace ya más de un año). Para entrar al campo de golf hace falta un 4x4 (el terreno es imposible). Por ello mis jefes me han comprado un todoterreno 4 puertas para que también pueda enseñar las viviendas a los potenciales compradores. Bueno, pues si me lo imponen, voy a elegir uno que me permita ir de excursión a cualquier parte de Omán, por lo menos así no me sentiré tan culpable de estar cargándome el planeta. He elegido un Jeep Wrangler Sahara:
Sin pasar 24 horas desde que me lo dieran, lo bautizamos en el desierto. Por si acaso el coche se iba a pensar que iba a ser usado solo para ser el abusón del asfalto.Las enormes dunas imponen mucho y los buitres del desierto, que por cierto son blancos, no parecían tener mucha confianza en nosotros.
Pero a pesar de la inmensidad de las dunas:Salim, nuestro guía (abajo, derecha)
nos guió con mucha pericia:
Este vídeo hay que verlo, Miguel Ángel vale para la tele:
El Wrangler (bautizado el patrulla por ser verde como el coche patrulla de la Guardia Civil pero sin puertas blancas) se portó como un campeón.
Para ser sincero, estoy encantado con el coche. Es como un juguete pues es tan popular en los EE.UU. que por internet le puedes comprar miles de accesorios, repuestos y modificaciones. Me encantaría comprarle el accesorio para llevar las tablas de snowboard, si tan solo me fuera posible usarlo una vez.
Nos sirvió para llevar a nuestro amigo Miguel Ángel, visitándonos una semana, hasta el desierto y el Wadi Bani Khalid (en otro post lo contaré).
Naomi también condujo (foto de arriba).
Pero para ser sincero, fui yo el que se atascó en la arena (mi primera vez). Me dio miedo tirar con alegría un coche nuevo por un barranco de arena así que al ir despacio se quedó colgando del pico. Miguel Ángel pagó las consecuencias (arena hasta en los oídos).
Lo bueno es que pude estrenar mi nueva pala, comprada ex-profeso para la ocasión.
Pero la pala era menos necesaria que la experiencia de Salim. Hay que quitar la arena por delante, no por el lateral. Y con las manos basta (en este caso).
El patrulla no se quedó en la arena. Nos llevó al final de la Thunder Road y más allá. A la vuelta del desierto, para alegría de Charlie (abajo derecha), la llevamos a la playa de los cangrejos:
Por cierto, el patrulla viene con techo duro descapotable por piezas o techo blando de lona. Ahora que han bajado las temperaturas lo llevamos descapotado como en la foto.
¿Por que la llamamos la playa de los cangrejos? Que pregunta más tonta diría el del exoesqueleto de la foto de abajo. Pues la respuesta está haciendo click en la foto de arriba.
Charlie es lo suficientemente lista como para tenerle respeto a los cangrejos, que por otro lado salen pitando en cuanto te ven a 30 metros de distancia, salvo el despistado de arriba.
Pero por suerte le ha perdido el miedo a las olas:
(Charlie es la rubia feliz de la derecha)